Tiempo de siembra.
En pueblos pequeños como el nuestro, en todas las casa ha habido y sigue habiendo un trozo de tierra donde plantar un pequeño huerto. Son tradiciones ancestrales, que han ido pasando de generación en generación.
Siempre fue un sustento importante para el caserío y aunque hoy en día no lo sea tanto, sigue siendo importante.
Son tiempos en los que se vive deprisa, se consume en grandes superficies y no se valora como se debiera el producto local y de cercanía. Quizás cabría esperar que desde la administración se diese más importancia a esto pero no, solo ponen travas.
Nos dicen que no, que no podemos trabajar el pequeño huerto. Que una persona sola en su parcela, rodeado de naturaleza es un peligro letal y mientras tanto en las ciudades las fábricas trabajando ( muchas veces sin las medidas de protección adecuadas), los metros,autobuses, funcionando. Que cinismo y que hipocresía.
Espero que se den cuenta de lo que están haciendo y rectifiquen a tiempo, pero si no se dan prisa será demasiado tarde.